Hoy os presentamos una receta de Gambón al ajillo que es perfecta para romper con la monotonía en la cocina. Si bien es más habitual preparar los gambones a la plancha, no es la única opción para cocinar este marisco. Atrévete a experimentar esta manera diferente de elaborar los gambones y comprueba que, como reza el dicho, ¡en la variedad está el gusto!
Quizá el gambón no se elabore al ajillo tan a menudo como las gambas o los langostinos, pero la receta funciona igual de bien. Obtendremos un plato de sabor estupendo y que además resultará bastante económico.
Gambón, gamba y langostino: Semejanzas y diferencias
El gambón tiene en común con el langostino que ambos son decadópodos, es decir, crustáceos de 10 patas. La mejor manera de distinguir uno de otro es fijándonos en su color. El langostino suele tener un color más bien rosáceo, mientras que el gambón tiene tonos más cercanos al rojo-anaranjado.
En cuanto al sabor, el del gambón es muy similar al de la gamba. Esto quiere decir que, a diferencia del que langostino, que tiene un gusto más intenso y la carne más dura, el gambón tiene se siente más suave en el paladar, y también se le nota una textura más tierna. Pero, frente a la gamba, el gambón tiene mucha más carne ya que es bastante más grande.
Podríamos decir que el gambón es una joya modesta del mar, y el Gambón al ajillo tiene un punto jugosito que de seguro triunfará en tu mesa. Veamos, en primer lugar, los ingredientes que necesitaremos.
Ingredientes para un delicioso plato de Gambón al ajillo
- 1/2 kg. de gambones de tamaño medio.
- 3 dientes de ajo.
- 100 ml. de aceite de oliva virgen extra.
- Pimentón picante.
- 1 guindilla.
- Sal.
- 50 gr de mantequilla (opcional).
- Albariño de las Rías Baixas.
Nuestra receta de Gambón al ajillo
- Como siempre que cocinemos con ajos, lo primero será pelarlos y trocearlos en pedazos pequeños. Hacemos lo mismo con la guindilla.
- Después habrá que pelar y descabezar los gambones. Podemos reservar las cabezas y las cascaras para hacer un caldo de marisco que podremos utilizar para elaborar otros platos.
- Para una correcta limpieza de los gambones, además será necesario vaciar los intestinos. La mejor manera de hacerlo es tirando con cuidado después de hacer un pequeño corte transversal con un cuchillo apropiado.
- En una cazuela pequeña ponemos aceite a calentar y añadimos los ajos troceados y la guindilla. Podemos añadir un poco de mantequilla para que el plato esté más jugoso. Si lo hacemos, tenemos que removerla bien hasta que se deshaga. Pasados un par de minutos ya podemos añadir los gambones. Añadimos sal al gusto y nos aseguramos de que los gambones se cuecen bien. Dos minutos a cada lado debería bastar.
- Una vez hayamos apartado la mezcla de Gambón al ajillo del fuego es el momento de sazonar con pimentón picante. Intenta no pasarte pero tampoco quedarte corto.
- Dejamos reposar un par de minutos y servimos.
Presta atención a los tiempos y al maridaje
Como puedes comprobar, esta receta de Gambón al ajillo se prepara en un pispás. Por eso es muy importante que estés atento y no olvides remover los gambones para evitar que se quemen. Lo ideal es mantener el aceite a una temperatura constante.
Para darle un toque de frescor al plato puedes añadir unas hojas de perejil cuando ya estén cocidos, no antes. Y por último, te recomendamos maridar el marisco con un buen Albariño de las Rías Baixas. Puedes elegirlo directamente en nuestra web, donde encontrarás una selección de auténtica calidad.