la elegancia
El Buey de Mar (Cancer pagurus) es un animal propio del Océano Atlántico. El Galicia tenemos la suerte de contar con los mejores ejemplares porque son grandes, fuertes (sanos) y llevan una buena dieta. Estos imponentes cangrejos son el deseo de cualquiera que adore el marisco, porque tienen un sabor inconfundible. Y bajo esa coraza, están llenos de jugosa carne. Estas son algunas curiosidades del buey de mar, la elegancia hecha cangrejo.
Un felino en el mar
En el buey de mar, la elegancia reluce en sus paseos nocturnos. Adora la noche. Cuando cae el Sol y llega la oscuridad, el buey aprovecha para darse un festín. Se alimenta de otros animales, porque es carnívoro.
Y no tiene un gusto cualquiera. Come otros crustáceos y moluscos, disfrutando tanto de ellos como hacemos nosotros. Solo que a su dieta también incorpora las preciosas estrellas de mar.

Un cangrejo imponente con brazos de culturista
El impresionante cuerpo del buey de mar se caracteriza por lo que para nosotros sería un tren superior de infarto. Sus dos patas delanteras parecen dos brazos esculpidos en mármol rojo. Siendo los de los machos mucho más voluminosos que los de las hembras.
Le siguen cuatro patas más a cada lado, que disminuyen su tamaño a medida que se alejan de esos brazos destructores.
Un ladrón de guante negro
Crustáceo deseado, roba el corazón de todo el que lo prueba por primera vez. Fácilmente distinguible entre los de su clase, le delatan los guantes de negro intenso que cubren sus mortíferas pinzas.

Buey de mar, la elegancia en el caminar
Esta mole, no es un cangrejo cualquiera. El buey de mar de Galicia tiene las patas cubiertas de pelo. Le protege y le ayuda a zafarse de predadores, camuflándose entre rocas y algas.
Pero nada de esto impide que, como buen cangrejo su desplazamiento sea hipnótico. Con un punto más, puesto que se mueve más despacio. Y tiene la capacidad de caminar hacia delante.
Un modelo curvy
Su cuerpo chato, es más ancho que largo. De color del cobre, varía entre marrón oscuro y rojizo. Y los hay con caparazones mimetizados. Alcanza los 25cm por 10cm. ¡Y puede llegar a pesar casi 5 kilos!
Para nosotros su talla es genial. Y su valor nutricional reside en su gran aporte proteico. También es rico en grasas, a diferencia de otros mariscos. Rico en vitaminas (B3, B5 y E) y muy rico en minerales (sodio, calcio, potasio y fósforo).
Ellas son unas tipas duras
Uno de los motivos por los que consideramos al buey de mar, la elegancia del Atlántico, es por su “capacidad” para estar a la moda. Porque muda. Y mientras lo hace, necesita que alguien le eche una mano para mantenerse a salvo.
Es común que los machos ejerzan como guardaespaldas de las hembras que tienen cerca, mientras estas cambian su caparazón. Pero ellas, no son tan consideradas. Muchas aprovechan este momento de debilidad para darse un festín a base de sus compañeros.
Algo, por otro lado, muy común en el cruel mundo de los cangrejos: el canibalismo.

Buey de mar con buen olfato
Cuando decimos que come cosas ricas es porque su sistema nervioso complejo, le permite distinguir muy bien los sabores. Y, por el mismo motivo, cuenta con un olfato perfecto para la caza.
Aunque él, también acaba cayendo. Se captura, con nasas y trampas, entre noviembre y mayo.
Si participara en Héroes.., sería Claire
Si algo señala a la actriz que encarna a Claire Bennet es su atractivo. Sin embargo, su personaje en la mítica serie americana es la envidia de cualquiera en cuestión de súper poderes: prácticamente inmortal.
En el caso del buey de mar, la elegancia la pierde en ocasiones cuando, como Claire, está en plena ejecución de su capacidad para regenerar sus miembros amputados. Cuando está herido en una de sus patas, se la secciona para permitir que crezca una nueva.
¿Cómo sabemos si un buey de mar es macho o hembra?
Por el abdomen. Siendo más abultado el de ellas. Puedes reconocer un buey de mar nacional de los importados por: el color marrón fuerte, la gran cantidad de pelo en sus patas y las uñas fuertes en las que rematan. Aunque la mayoría del buey de mar del mercado es extranjero.
Si quieres asegurarte de estar comprando una pieza auténtica de Buey de Mar, la elegancia gallega y orgullo de nuestra costa. Puedes hacerlo a través de nuestra tienda online. Y lo tendrás en casa en 24 horas.
Cocido con sal y laurel… ¡Es una delicia!
La forma de prepararlo más extendida en Galicia es cocido. Debe hacerse con el Buey de Mar muerto. Para ello, primero se introduce en agua fría con hielo. Después, se sumerge la pieza en abundante agua salada cuando hierva.
El tiempo comienza a contar desde que el agua rompe a hervir de nuevo. Y varía según el tamaño del Buey: pequeño (15 minutos), mediano (20 minutos), grande (25 minutos), extra grande (30minutos).